Las revisiones ginecológicas son exámenes médicos que se realizan para evaluar la salud de los órganos reproductivos femeninos, incluyendo el útero, los ovarios y la vagina. Las revisiones ginecológicas se recomiendan para todas las mujeres a partir de los 21 años o cuando comiencen a tener relaciones sexuales.

Las revisiones ginecológicas suelen incluir un examen físico y pueden incluir pruebas de laboratorio como un examen de orina y una prueba de Papanicolaou (PAP). El examen físico incluye un examen pelviano, en el que el médico evalúa el tamaño y la forma del útero y los ovarios y busca cualquier anormalidad.

Las revisiones ginecológicas son importantes porque pueden detectar problemas de salud a una etapa temprana, cuando son más fáciles de tratar. También pueden ayudar a las mujeres a entender mejor su ciclo menstrual y a prevenir enfermedades como el cáncer de cuello uterino. Es importante que las mujeres se sometan a revisiones ginecológicas regularmente para mantener su salud reproductiva.